Falsos Mitos

Falsos Mitos

Falsas creencias sobre perros y gatos

Hoy en día aún siguen transmitiéndose de boca en boca muchas afirmaciones sobre los perros y gatos que distan mucho de la realidad. Creencias que se han ido manteniendo a lo largo del tiempo y que para muchos son axiomas inquebrantables.

Siempre se ha dicho que…” “En el parque me contaron que…” “Pues toda la vida se ha hecho así…” “Hace tiempo el veterinario me dijo que…

Debemos desterrar falsos mitos (algunos perpetuados incluso por los veterinarios) como los que comentamos a continuación.

1. Un cachorro no se puede sacar a la calle hasta que tenga todas las vacunas.
FALSO.

Los perros empiezan a vacunarse alrededor de las 6 semanas de vida y acaban el plan vacunal más allá de los 3 meses. Si esperamos a sacar a nuestro cachorro hasta entonces, le habremos privado de su período de socialización, el cual va desde la 3ª a la 12ª semana de vida. Durante este período el cachorro debe tener contacto con otros perros y con personas, así como con el ambiente que le va a rodear cuando sea adulto.

Si le privamos de su período de socialización, cuando sea adulto puede mostrar fobias, agresión, miedo…

2. Un cachorro no se puede bañar hasta que tenga todas sus vacunas.
FALSO.

¿Por qué no? ¿Qué hacen con nosotros nada más nacer? ¿Y al día siguiente? ¿Y al otro? ¿Y si el cachorro está lleno de suciedad, pulgas, garrapatas…?

Podemos bañar o lavar a un cachorro cuando sea necesario. Por supuesto lo secaremos bien y no lo dejaremos en corrientes de aire.

3. A los cachorros de razas grandes hay que darles calcio para que crezcan mejor.
FALSO.

Quizás cuando no había dietas específicas para perros o cuando la alimentación que recibían era pobre, podía estar indicado el suplemento vitamínico-mineral. Pero hoy en día si a un cachorro que come una dieta adecuada, le aportamos calcio extra, lo único que vamos a conseguir son problemas óseos y articulares.

4. Lo perros se deben bañar muy pocas veces, porque pierden la protección de la piel. Los gatos no se bañan nunca.
FALSO.

Siempre que usemos un champú adecuado a la piel de la mascota, cuyo pH es distinto al humano, podemos bañar a nuestro animal cuando lo necesite.

Habitualmente un perro se baña una o dos veces al mes. Hay razas, como las nórdicas, que no necesitan baños tan frecuentes, y otras, con una piel muy seborreica, como p.e. el cocker spaniel, que necesitan baños aún más frecuentes.

En cuanto a los gatos, es cierto que su costumbre de acicalarse a diario les permite, generalmente, mantener su pelo en buenas condiciones; pero no está de más acostumbrarles desde pequeños al agua y darles un baño de vez en cuando (no de la forma en la que se baña a un perro, sino con una esponja o paño húmedo, para no asustarlos ni estresarlos mucho con la ducha).

5. Las perras tienen que parir al menos una vez en su vida.
FALSO.

Se argumentaba que así se evitaban las gestaciones psicológicas, los tumores ováricos y uterinos…lo cual no es cierto.

Una perra no necesita ser madre para estar perfectamente sana.

6. Si mi perro tiene la nariz caliente es porque tiene fiebre.
FALSO.

Un perro con fiebre puede tener la trufa caliente, pero el mero hecho de tener la trufa caliente no implica tener fiebre.

La única forma de conocer la temperatura de nuestra mascota es medirle la temperatura rectal.

7. Los machos con un solo testículo son estériles.
FALSO.

Los machos criptórquidos, que es el nombre que recibe este problema, son perfectamente fértiles aunque solo tengan un testículo en la bolsa escrotal. Los criptórquidos bilaterales (ningún testículo descendido sí pueden ser estériles).

Lo que sí es cierto es que si el testículo se ha quedado en el abdomen es mejor su extirpación quirúrgica, pues muchos de ellos se tumorizan en la edad adulta.

8. Es normal que los gatos vomiten de vez en cuando.
FALSO.

Por su costumbre de acicalarse de continuo, los gatos ingieren pelo, el cual eliminan con las heces. Pero algunos gatos, sobre todo los de pelo largo, van formando bolas de pelo que expulsan con el vómito. Algunas veces estas marañas de pelo (tricobezoares) se pueden quedar atascadas en intestino. Todo esto se puede evitar si damos a nuestro gato un poco de malta a diario, la cual va a lubricar el pelo y el tracto digestivo, favoreciendo la eliminación del pelo con las heces.

Pero no solo las bolas de pelo pueden causar vómitos en los gatos. Otros problemas digestivos, hepáticos, renales…pueden estar relacionados con los vómitos, por lo que si nuestro gato vomita a menudo y la causa no son los pelos, el veterinario deberá investigar el problema.

9. Los perros no pueden comer chocolate.

En este caso todo depende del tipo de chocolate, del tamaño del perro y de la cantidad ingerida de chocolate.

Un perro se puede intoxicar con chocolate debido a la teobromina que éste contiene, produciéndole vómitos, diarrea, temblores musculares, convulsiones, arritmias, hipertensión, hipertermia, coma y muerte.

Pero para ello debe ingerir una cantidad de chocolate por kilo de peso.

Así, la dosis letal del chocolate blanco es 57 g/Kg, y la del chocolate negro 6 g/Kg. Por lo que un chihuahua se puede intoxicar con una simple porción de chocolate, pero un mastín se podría comer una buena ración sin problemas.

10. Si un perro come dulces se puede quedar ciego.
FALSO.

La ceguera por cataratas la puede producir la diabetes, no un dulce. Sí es cierto que si damos muchos dulces a un perro que además está obeso, apenas se ejercita y que encima tiene algún otro problema de salud, podemos predisponerlo a la diabetes.